Feliz cumpleaños querido amigo / Raquel Sepúlveda
En medio de un frío invierno, nos vemos conmovidos, por el cumpleaños número 99 de nuestro querido compañero y amigo P. Pepe Aldunate.
Con una contingencia nacional remecida emerge la figura de este sacerdote obrero, jesuita, colaborador de San Alberto Hurtado, que sin temer a la pobreza, y a la represión, surge como quién ha encarnado al evangelista Mateo en su propia piel. Y lo anterior desde ambas perspectivas. Sufrió hambre, y sin duda dio de comer, tuvo sed y dio de beber, fue forastero y recibió en su casa, fue vestido y vistió a sus hermanos. Estuvo enfermo y fue a visitar a más de alguno de ellos, fue detenido, y acompañó a quién detuvieron en un furgón de carabineros hasta el lugar de detención, sin importarle el quedar detenido junto a él. (Mateo 25,35-36)
Ante diversas estructuras de poder él sólo se ha mantenido consecuente y coherente al Cristo humilde y sencillo que pende del madero de la cruz.
Es en este Chile donde muchas veces vimos actuar a nuestro hermano sacerdote, que lejos de permanecer ligado a viejas estructuras, fue gestor de cambios y asumió muchos de ellos, como cuando la Iglesia lo invita a caminar en la senda del Concilio Vaticano II.
Forma Parte del Equipo Misión Obrera, EMO, decide asumir la pobreza y la suerte de los marginados por la sociedad. Asume la no violencia activa, motivado por la tortura a que eran sometidos los presos políticos de la dictadura, a través del “Movimiento contra la tortura Sebastián Acevedo.”
Sin duda, este sacerdote sumergido en el mundo de los más desprotegidos forma parte de ollas comunes, comedores familiares, talleres laborales y bolsas de trabajo para hermanos cesantes.
Y siendo acusado de sostener una posición conflictiva y crítica a la conducción de la Iglesia que realiza Ezzatti, tan sólo por dar su punto de vista, igualmente nos provee de una mirada nueva que refresca y hace renacer esa postura consecuente ya sea con nuestra fe, como con los ideales que mueven nuestra vida, a veces tan olvidada por intereses particulares, y mezquinos donde se intenta disfrazar un interés colectivo.
Gracias por hacer una inflexión en parte de nuestra historia para tener en cuenta los grandes desafíos a los que la fe nos puede motivar, y al verdadero seguimiento al que tenemos que guardar fidelidad.
¡Feliz Cumpleaños Querido Padre! Que nuestro Dios te siga sosteniendo muy cerca de su corazón.
Raquel Sepúlveda Silva