Diciembre 12, 2024

Dominico pide que el Papa reduzca al estado laico a McCarrick

 Dominico pide que el Papa reduzca al estado laico a McCarrick

El religioso Dominico autor, en noviembre de 2000, de la denuncia en la nunciatura en contra del ex cardenal abusador, reconstruye el caso para “Commonweal”: había obispos que sabían todo.

El padre Boniface Ramsey, el dominico que enseñó en el seminario de la Inmaculada Concepción de Newark y que se enteró de las molestias perpetradas por parte del obispo Theodore McCarrick, fue quien escribió al nuncio Gabriel Montalvo después tras el nombramiento de McCarrick en Washington, pide al Papa que reduzca al estado laico al ex purpurado. Ramsey escribió un informe detallado que fue publicado en la revista “Commonweal”.

Después de haber descrito nuevamente lo que sabía sobre las molestias en contra de los seminaristas, a los que el “tío Zed” (así se hacía llamar) invitaba a su casa en la playa (en la que había cuatro camas, además de la de McCarrick, pero los invitados eran cinco y uno de ellos debía compartir la cama con el obispo), Ramsey insiste en la razón por la cual fue excluido del colegio de asesores con derecho a voto en el seminario de Newark: se había expresado a favor de la expulsión de uno de los seminaristas “favorecidos” por McCarrick: el chico trabajaba como asistente de vuelo y el obispo lo conoció durante uno de sus viajes, cuando lo invitó a convertirse en uno de sus seminaristas.

El padre Ramsey añade un nuevo detalle, sobre los “rumores” que circulaban sobre las costumbres de McCarrick ya desde los primeros años de la década de los noventa. Estos rumores habían llegado a personas que estaban fuera del estrecho círculo de las Iglesias de Metuchen y Newark. Por lo menos es lo que se deduce de las palabras que el arzobispo de Louisville, monseñor Thomas Kelly, inmediatamente después de que se cancelara el derecho a voto de Ramsey en el seminario: «Todos nosotros sabíamos que McCarrick había encontrado a alguien [el seminarista, ndr.] en el aeropuerto». El dominico considera que ese «todos nosotros» significaba «los hermanos obispos de McCarrick» y que esta era la «primera señal de que el conocimiento del comportamiento de McCarrick se había difundido entre los obispos estadonidenses».

Ramsey también afirmó que habló sobre McCarrick con el cardenal Edward Egan, arzobispo de Nueva York, en julio de 2004 (es decir dos años antes de que Benedicto XVI “acelerara” la jubilación del polémico arzobispo de Washington). «Tuve la ocasión de afrontar el argumento del comportamiento de McCarrick. El cardenal Egan no quiso discutir sobre ello y pasamos a otra cosa. Pero estaba perfectamente claro, por su reacción inmediata, que sabía sobre McCarrick». Al ver que McCarrick concelebraba en el funeral de Egan, en 2015, Ramsey escribió al cardenal Sean O’Malley, para indicarle lo que sabía sobre el cardenal emérito y su comportamiento con los seminaristas, pero precisando que nunca había tenido noticias sobre abusos de menores.

Ramsey logra llegar a O’Malley, pero el secretario del cardenal respondió que a su superior no competían este tipo de acusaciones (abusos de mayores), puesto que la Comisión que dirigía se ocupaba solamente de pederastia. El dominico considera posible que su carta nunca llegara a manos de O’Malley directamente.

El padre Boniface invita a las autoridades eclesiásticas y al Papa a actuar con rapidez, «pero también de manera comprensible» para la gente común: no le parece suficiente que se haya pedido que McCarrick viva en aislamiento y oración ni que se le haya retirado la dignidad cardenalicia. «La destitución pública de McCarrick del estado clerical, y no solo del colegio cardenalicio, sería una respuesta apropiada y comprensible para todos por sus crímenes y pecados».

Andrea Tornielli  –  Ciudad del Vaticano

Vatican Insider   –   Reflexión y Liberación

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