La Carta de Pedro Casaldáliga que cambió la Amazonía
En estos días de Sínodo en Roma, diversas Comunidades Latinoamericanas nos piden hacer esta Memoria Histórica desde el pensamiento y la praxis de don Pedro… Profeta y fiel Discípulo del Nazareno.
El día de su consagración como Obispo en 1971, Don Pedro Casaldáliga publicó lo que sería la primera denuncia mundial sobre la situación de la Amazonía. Esta acción en bien de los pobres y desposeídos le costó varias amenazas de muerte.
La Carta Pastoral “La Iglesia de Amazonía en conflicto con el Latifundio y la marginalización social“, es un interpelante documento histórico que marca un antes y un después en la defensa de los pueblos indígenas, del medio ambiente, de la situación de la mujer y en la lucha contra la pobreza y la marginalización. Es la primera vez que un Obispo se posiciona tan abiertamente en la bella Amazonía.
Recordando a la periodista Beta Campurbí; “en aquellos años, las tierras del Mato Grosso estaban dominadas por superposiciones de títulos de propiedad, en herencia principalmente, de la Ley de Tierras de 1850 que repartió ilegítimamente territorios ancestrales indígenas creando inmensas propiedades agrarias de hasta 7.000 kilómetros cuadrados. Eran tierras de pistolerismo, de desamparo jurídico e institucional “, donde la violencia era el método con el que se arreglaban los conflictos. Don Pedro Casaldáliga enterró a muchos campesinos, sin-tierra e indígenas en aquellos tiempos.
A lo largo de 30 páginas de Carta Pastoral, el Obispo Pedro analiza rigurosamente la situación de esclavitud y violencia en que vivían los pueblos y comunidades de la Amazonía, denunciando los problemas ambientales que, ya entonces, se empezaban a percibir y, claro, el genocidio de los Pueblos Indígenas que los terratenientes estaban llevando a cabo con el beneplácito del Gobierno militar brasileño.
Lo explícita en su profética Carta pastoral, citando al profesor Hélio de Souza Reis: “Indiferentes a todo, [los campesinos] tratan de ganarse el pan de cada día, pues para ellos sólo existen dos derechos: el de nacer y el de morir “
Un texto Profético
En tiempos en que casi nadie hablaba de la causa indígena; cuando la preocupación por el Medio Ambiente no estaba en la pauta de ninguna discusión; y cuando la pobreza extrema de los peones, a menudo esclavizados, era un asunto lejos de cualquier foco mediático o eclesiástico, la Carta Pastoral de 1971 de Don Pedro, se convierte en un documento que sacude Brasil y que internacionaliza y pone luz sobre la cruel situación económica, social y ambiental de la Amazonia.
El documento eclesiástico tuvo que ser impreso en la clandestinidad, fuera de la región del Araguaia, por la fiel colaboradora de Pedro, la Hermana Irene Franceschini: “Aquella mujer que, en plena dictadura, llevó en una caja, envuelta con un pañuelo, la primera Carta pastoral de Pedro Casaldáliga en un avión militar!. Cuando le preguntaron qué llevaba, ella respondió “medicamentos, alguna ropa, cosas sin importancia … si quiere puede abrir …” !!
La Carta del obispo Pedro tuvo eco en la mayoría de periódicos y publicaciones de todas partes de Brasil y desencadenó una revolución en plena represión militar, cuando los intereses económicos afines al régimen se estaban repartiendo el Centro Oeste del país a costa de los pueblos indígenas, de los peones y del medio ambiente. Así lo describe con precisión el sociólogo José de Souza Martins (1995), “o documento é um dos mais importantes na historia social do Brasil”.
Gracias Don Pedro por este legado que lo difundimos con alegría en el corazón, dando Gracias por tu hermoso testimonio de vida buena para todos y todas en tu querida Amazonía que hoy se expresa con libertad, canta y baila en la mismísima Basílica de San Pedro en el Sínodo convocado por el indomable Papa Francisco. Gracias a Dios!
Jaime Escobar Martínez
Editor de Revista Reflexión y Liberación