Noviembre 12, 2024

Las Tragedias humanas tienen su revés 

 Las Tragedias humanas tienen su revés 

Los noticieros televisivos, especialmente en Chile se destacan por entregar todas las mañanas nuevas preocupaciones por la delincuencia, los asaltos, las corrupciones, las catástrofes, los feminicidios… Y, como si no fuera suficiente  lo que ocurre en el país, los periodistas rebuscan en cuantas partes en el  mundo donde puede haber ocurrido alguno evento dramático. 

La guerra  en Ucrania y la de la Franja de Gaza entregan al público muchos materiales conmovedores que impactan las mentalidades. Desgraciadamente, nuestros contemporáneos sufren de la rivalidad morbosa  por los cálculos de audiencia (rating) de los canales de televisión. Esta curiosidad  malsana encubre un temor y una inseguridad que se populariza. El miedo de  ser la próxima víctima de la delincuencia.  Se  anticipa cualquier desgracia que puede ocurrir a uno mismo o a uno de nuestros familiares o amigos.  La amenaza de un catástrofe natural, de una enfermedad  irremediable, de un quiebre económico preocupa  y, a veces,  paraliza.  Muchos  preconizan el ‘carpe diem‘ el disfrutar inmediato, buscan  cualquier novedades, remedios,  experiencias , drogas ,  no quieren recordar nada del pasado,  no quieren pensar al futuro, y  hasta dudan del calentamiento global  y de la amenaza de un  desastre ecológico.  Todas las generaciones, los jóvenes como los ancianos  viven angustiados, estresados, desesperados. 

¿Será que  tenemos más problemas o que vivimos mayor inseguridad que nuestros antepasados? Muchos  historiadores y sociólogos explican este desencanto por un sentimiento de bien estar perdido. El  progreso no sigo por adelante y,  de repente, surgen nuevos problemas y esto produce  frustraciones.  Los problemas mentales y los desordenes sociales  son las manifestaciones de un Progreso que parece engañador.  La preocupación  en torno a la ‘inteligencia artificial’  es reveladora  de estas ilusiones  y  de estos temores.   

La magia de la fiesta de Navidad, los deseos de felicidad que se comparten, los adornos  domésticos y públicos,  la compra de regalos, los gastos de celebración … es una pausa que nos damos de vivir un mundo lleno de problemas y dramas. 

La Navidad  que celebra religiosamente  el nacimiento  de Jesús deja poco a poco el  espacio  a otro personaje más encantador, mágico y comercial: el viejito pascuero. El Pesebre puede estar  todavía presente al pie del pino de navidad  pero se infantilizó tanto que vale la pena profundizar su originalidad y descubrir lo que algunos pintores han lograr expresar magníficamente: los  nacimientos  en “claro-oscuro” , un niño Jesús iluminado  en un ambiente  de lo más sombrío.   

Son pocas líneas de la Biblia  que nos retratan  el Pesebre. Al leer el relato  del nacimiento en el evangelio de San Lucas,  se puede entrar  en  el encantamiento de la luz que ilumina la noche,  el coro de la multitud de ángeles que cantan  la gloria de Dios  y también lo bucólico de los  pastores con sus rebaños que fueron  los primeros a ver al recién nacido-Dios.   Pero si completan el relato con la lectura del evangelio de San Mateo   se puede conocer  a demás a José el marido excepcional de María y sus sueños premonitorios,  la estrella  y  los Magos venido de Oriente.  Pero de repente, esta  visita desencadena  la tragedia de la masacre de los niños de Belén, la huida de  esta  familia de Jesús  a Egipto y su posterior radicación en  Nazaret. Es como si la Magia  del pesebre se perdería en unas pocas  líneas. Pero  leyendo de nuevo  se aprende que es  el censo que obligó José y María  a ir al sur del país,  era  recaudación del impuesto, no encontraron posada, en realidad  el país acumulaba  7 siglos de  continuas invasiones , represiones, saqueos, deportaciones, destrucción  de Jerusalén, rebeliones y represiones, crucifixiones en serie, era una  época trágica con el  rey Herodes, un  tirano cruel al servicio del imperio romano  y su hijo Arquelao fue peor que él  todavía, (cuenta un historiador de la época) que éste degolló a más de 500 israelitas  en el templo, fue esta situación que relegó los padres  de Jesús en un pueblo perdido  lejos de la capital.  

El  conflicto actual de Israel con la Franja de Gaza  ocurre en este mismo país, es como si el tiempo no hubiera pasado. Las tragedias se repiten a menudo, la guerra de Rusia con Ucrania repite  horrores ;  en 1932, Stalin el dictador ruso, en una época de hambruna  en Rusia,  saqueó  los campesinos de Ucrania  siendo responsable de un genocidio por desnutrición de tres millones de niños.  Recordamos  el genocidio de seis millones de judíos  y gitanos por la Alemania  de Hitler (el holocausto).  La historia  cuenta una tragedia  después de otra, fueron  las guerras de religiones y sus hogueras,  las cruzadas, la Inquisición,  la colonización  de África con los  esclavos negros (que fue el mejor negocio de los portugueses a la época.) Las atrocidades del  exterminio indígena  en toda América.  Sin  olvidar los trabajos infantiles en las industrias…  

 Algunos piensan que los hombres eran más malos antes pero  los ejemplos cunden en el último siglo. Durante la 2ª guerra mundial, en la guerra de trinchera de 15 dias en la Marne en Francia murieron  500.000  soldados. A Hiroshima, Nagasaki, con la bomba atómica murieron 210.000 personas en un par de días.  La guerra du Vietnam  hizo  tres millones de víctimas… Por citar algunas pocas cifras. 

No eran los buenos contra los malos. Eran una raza contra otra raza, los más  fuertes aplastando los más débiles, era el lucro,  el  poder… Muchos  declararon Dios como su aliado.  Los soldados alemanes tenían un cinturón que rezaba ‘Gott mit uns‘ (Dios con nosotros) y el Cardenal Spellmann  bendecía  USA los ejércitos en Vietnam, en el conflicto Rusia-Ucrania se pelean cristianos contra cristianos. En Medio Oriente, dos religiones monoteístas judíos y musulmanes  se pelean ‘a muerte’. 

Es en este panorama  de la tragedia humana que  celebramos  nuestra Navidad 2023. No solamente Dios ha nacido entre tragedias  sino que Jesús  ha muerto victima de la represión religiosa y política de su tiempo.  Pero con Él, es el proyecto salvador de Dios que brilla en las tinieblas. Los evangelios con los testimonios de la corta vida de Jesús, sus enseñanzas y su amor extremo de la cruz  irrumpen constantemente en la tragedia humana. La instauración del  Reino de Dios puede ser de trecho largo pero la determinación de Dios no falla. Él nos acompaña y  auxiliar a los hombres en su historia, tanto en su realización individual como global. Su proyecto no es de  llegar  condenar sino de levantar una humanidad  a su imagen.   

Brilla Navidad  cuando se ven menos victimas en los conflictos, cuando se ven muchos esforzados de frenar las masacres,  cuando intervienen instancias internacionales mediadoras. Cuando se organizan  auxilios a  las poblaciones civiles. Cuando existen leyes de la guerra, tribunales internacionales,  voluntarios de  protección civil,  condenas para criminales  de guerra.  Es Navidad cuando los  hombres de buena voluntad  y los cristianos se integran con su vida en esta Salvación divina  paulatina  pero segura. Lo hacen  por sus oraciones, por  su convivencia  familiar, por sus compromisos sociales y políticos, por su perdón de las ofensas, de su amor universal.   Nosotros tenemos hasta  una misteriosa solidaridad humana  para con todos los que viven tragedias. Porque “nuestras” son  las oscuridades de nuestras vidas, “nuestros” son los pecados.   El que reza el Padre nuestro no  pide  solamente perdón por lo propio, lo pide por el pecado del mundo Es manera de celebrar la misericordia  infinita de Dios. ‘Libéranos del Mal‘.

 Feliz Navidad,  nos ha nacido un Salvador.  

Paul Buchet – Chile

Editor