Después del dolor viene la alegría pascual
“Cuando caminamos sin la cruz, cuando edificamos sin la cruz y cuando confesamos un Cristo sin cruz, no somos discípulos del Señor” (Papa Francisco).
Por estos días, el sufrimiento está latente en el mundo, existe un sufrir desde lo espiritual y desde lo físico. En una cultura donde prevalece el gozar y disfrutar de las cosas, y donde la felicidad se ha vuelto comercial, Jesús nos invita a frenar en el correr de la vida y a recordar su Pasión- Muerte y Resurrección.
Tal como señaló el Papa Francisco, no somos discípulos si no caminamos, edificamos y confesamos un Cristo en la cruz. El signo de la cruz nos recuerda que en el madero la forma vertical representa la divinidad de Jesús y la forma horizontal representa su humanidad. Los primeros cristianos profesaron a este Cristo Divino y Humano, este Cristo que aceptó padecer para entender la aflicción de su pueblo, para hacerse uno entre todos.
Hoy Jesús no se queda lejos del sufrimiento que padecen tantas personas a causa de la pandemia, hoy con más fuerza nos invita a caminar junto a él, nos exhorta a hacer este vía del dolor, para que juntos se pueda gritar y abrazar como en los primeros siglos, para anunciar que después de la muerte viene la resurrección, que después del dolor viene la alegría pascual.
Que nuestro amigo y hermano Jesús, nos acompañe y bendiga en este caminar santo.
Julio césar Antipani Leal
Profesor de Filosofía y Religión