Abril 24, 2024

Caso Rupnik: ¡Las víctimas nunca tienen la culpa!

 Caso Rupnik: ¡Las víctimas nunca tienen la culpa!

“Gran dolor y consternación”, cercanía a las víctimas y compromiso de mayor transparencia y tolerancia cero hacia toda violencia física, sexual, psíquica y espiritual. Así lo ha expresado unánimemente la Conferencia Episcopal Eslovena en una Declaración sobre el caso del padre Marko Ivan Rupnik SJ presentada esta tarde en Liubliana, en los locales de la Galería Družina, a la que han asistido el presidente de los obispos eslovenos, monseñor Andrej Saje, y el arzobispo de Liubliana, Stanislav Zore.

Los obispos, refiriéndose a las declaraciones de los jesuitas, condenaron toda violencia y abuso y dijeron que apoyaban a los superiores de la Compañía de Jesús en sus “esfuerzos en la búsqueda de la verdad y la justicia”. Luego subrayan: “¡Las víctimas nunca tienen la culpa! Estamos de su lado. Les expresamos nuestra compasión y cercanía y nos comprometemos a ayudarles. También expresamos nuestro apoyo a toda la comunidad eclesiástica”.

Los obispos dicen estar tristes porque durante décadas no se ha escuchado a las víctimas. “Aunque algunos hechos están, desde el punto de vista jurídico, ahora prescritos”, dicen los obispos, “siguen siendo detestables y condenables”. Los obispos afirman que quieren hacer “todo lo posible para seguir con mayor atención lo que sucede en nuestras comunidades eclesiales, para que en el futuro no se produzcan más abusos de autoridad por parte de personas que ocupan puestos de responsabilidad en la Iglesia”.

Al igual que ya había hecho en los últimos días el Padre Johan Verschueren, delegado del Superior General Arturo Sosa y Superior Mayor para las Casas Internacionales, en nombre de la Compañía de Jesús, los prelados eslovenos hicieron también un llamamiento a las víctimas para que se dirijan a las autoridades competentes, “a fin de llegar lo más completamente posible a la verdad y a un juicio objetivo”.

“Pedimos a todos que denuncien todos los abusos y la violencia. Al mismo tiempo, también pedimos paciencia para poder reforzar nuestras estructuras de prevención y ayuda, llevar a cabo todos los procesos previstos y continuar la labor de formación y sensibilización sobre la cuestión de la violencia sexual y espiritual. Sólo con un compromiso común podremos romper el muro de silencio, que oculta a los autores, y poner fin a este mal”.

Estos acontecimientos”, concluyen los obispos eslovenos, “deben convertirse en una ocasión de purificación y renovación de la Iglesia”: “La Navidad del Señor está cerca. Jesús viene a salvarnos y purificarnos; viene en nuestra oscuridad. Viene para ser la luz de los hombres. No permitamos que prevalezcan las fuerzas de las tinieblas y del mal”.

Antonella Palermo – Ciudad del Vaticano

Vatican News  –  Reflexón y Liberación

Editor