Papa Francisco y su praxis por una Iglesia pobre
En su cumpleaños número 78, nuevamente Papa Francisco nos sorprende. Ha querido compartir tan señalado día, con un pequeño servicio a los indigentes que viven en las calles romanas. Actitud coherente con sus históricas primeras palabras como Obispo de Roma: “quiero una Iglesia pobre para los pobres…”.
Francisco instruyó a su “limosnero”, Konrad Krejewski para que le entreguen alrededor de 400 sacos de dormir a esos indigentes que pernoctan en estaciones de trenes y suburbios romanos. Fue la guardia suiza y algunas religiosas los que se encargaron de cumplir este deseo de Francisco en el día de sus cumpleaños.
Comentan testigos presenciales de la “misión” encomendada por el Papa en la vía Nazionale, que los beneficiarios de los sacos de dormir de última generación, térmicos y de muy buena calidad, se les entregaban a los indigentes y solo se les pedía que “rezaran por el papa que les tiene en su corazón…”.
Este gesto solidario del Papa Francisco con los que nada tienen, no es nuevo. Son varias las acciones que el pontífice ha hecho como una forma mínima de mitigar el dolor de las personas que viven en la calle. Allí están las duchas que ordenó habilitar en el verano romano a un costado de la Plaza de S. Pedro, ha repartido tarjetas telefónicas entre los inmigrantes para que puedan llamar a sus familias o sobres con dinero entre los más pobres de la capital para que coman algo…
Asimismo, esta Navidad el Vaticano ha desarrollado la iniciativa “Lotería del Papa“, mediante la cual el pontífice rifa diferentes regalos que las autoridades le han ofrecido en el último año a cambio de un boleto valorado en 10 euros que irá destinado a estas obras de caridad.
Medios de prensa italianos señalan variados gestos del Papa Bergoglio que se suman a los otros “regalos” que el pontífice ofreció ayer a los más necesitados de Roma. Entre ellos, la invitación a un almuerzo por su cumpleaños a cuatro “sin techo” y el saludo a ocho vagabundos que estaban acompañados por el obispo Krajewski y que regalaron al Papa algunos girasoles.
Finalmente, hemos de consignar que la gerencia de la empresa española Coren (faenadora de pollos) comunicó a Francisco que como regalo de cumpleaños entregarán 800 kilos de sus “pulardas del convento” a los comedores sociales de Roma.
A pesar de los festejos, el Papa concluyó su audiencia en el día de su onomástico con una plegaria por las víctimas de los “ataques terroristas inhumanos” en Australia, Pakistán y Yemen, implorando: “Que el Señor reciba en su paz a los muertos, dé consuelo a los familiares y transforme los corazones de los agentes de la violencia que no tienen piedad ni siquiera con los niños…”.
Desde Chile nos congratulamos por este cumpleaños del Papa Francisco y sus 22 meses de radiante pontificado y proclamamos junto a nuestro amigo Antonio Gaspari que: El Papa Francisco hasta ahora ha sido un verdadero ciclón, un pontífice valiente y revolucionario. Su modo de hacer humilde y compasivo, su modo de vivir sobrio y riguroso, sus palabras que desafían a todos, su ser testimonio del Evangelio, encarnando coherentemente su ser el “siervo de los siervos”, Obispo de la diócesis de Roma que tiene el primado en la caridad. La humanidad y la familiaridad con la que busca, acoge y encuentra a todos, amigos y enemigos de la Iglesia. La valentía que tiene al realizar gesto y encuentro al límite de la audacia, como hacerse bendecir por el patriarca ortodoxo, llevar al imán a lo pies de la cúpula de S. Pedro, pedir ser entrevistado por Eugenio Scalfari, telefonear a Marco Pannella y al joven Daniel, visitar centros sociales frecuentados por pobres e indigentes, denunciar el lobby que alimenta las guerras, reunir a las principales religiones del mundo para desafiar la cultura del descarte y liberar las víctimas de las nuevas y viejas esclavitudes…
Jaime Escobar M.
Consejo Editorial de revista Reflexión y Liberación