Abril 19, 2024

La primera homilía del Papa Francisco en Casa Santa Marta

 La primera homilía del Papa Francisco en Casa Santa Marta

Hace seis años, el 22 de marzo, Radio Vaticano y  L’Osservatore Romano anunciaron la Misa celebrada por el Papa Francisco en la capilla de Casa Santa Marta. Para su gran sorpresa, los empleados de limpieza y jardineros que trabajaban en el Vaticano ese día, un total de unas treinta personas, fueron invitados a la celebración. Desde entonces, las homilías en la Domus Sanctae Marthae se han convertido en una de las características de este pontificado.

Somos invisibles” – dijo Luciano Cecchetti, encargado del servicio de jardinería y de la limpieza urbana, a nuestros micrófonos – “Estar delante del Santo Padre, en una misa para nosotros, es algo que no ocurre todos los días. Me di la vuelta y vi las caras de los empleados: todos salimos un poco con los ojos brillantes. Fue una misa muy sencilla, en contacto directo con el que fue elegido Papa, hace unos días. Le agradecimos mucho… sobre todo cuando nos saludó al final: nos presentaron uno por uno y para cada uno de nosotros tuvo una palabra. Lo que nos dijo un poco a cada uno de nosotros fue: ruega por mí.

La primera homilía

El Padre Federico Lombardi, entonces director de la Oficina de Prensa del Vaticano, había hecho un breve resumen de esa primera homilía. El Papa insistió en el pasaje del Evangelio de la liturgia del día (Jn 10,31-42): “Los judíos volvieron a traer piedras para apedrearlo. Jesús les respondió: “Os he mostrado muchas buenas obras de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedrearéis? Si tenemos un corazón cerrado”, dijo el Papa Francisco, “si tenemos un corazón de piedra, las piedras caen en nuestras manos y estamos dispuestos a tirarlas”, por eso debemos abrir nuestro corazón al amor.

La nota del Padre Lombardi

Muchos han pedido acceso a las homilías de Santa Marta de una manera completa y no sólo a través de los resúmenes publicados diariamente por los medios de comunicación del Vaticano. El Padre Lombardi respondió a esta petición con una nota del 29 de mayo de 2013, explicando el carácter que el propio Papa Francisco atribuye a la celebración matutina de la Misa en Santa Marta. “Es -dijo- una Misa con la presencia de un pequeño grupo de fieles (normalmente de cincuenta personas), pero con los que el Papa quiere mantener un carácter familiar. Por esta razón, a pesar de las peticiones que recibió, deseaba explícitamente que no se transmitiera en directo por vídeo o audio.

En cuanto a las homilías, no se dan sobre la base de un texto escrito, sino espontáneamente, en italiano, una lengua que el Papa posee muy bien, pero que no es su lengua materna. Una publicación “integral” implicaría, por tanto, necesariamente una transcripción y una reescritura del texto en varios puntos, ya que la forma escrita es diferente de la oral, que en este caso es la forma original elegida intencionadamente por el Santo Padre.

En resumen, sería necesaria una revisión del propio Santo Padre, pero el resultado sería claramente “otra cosa”, que no es lo que el Santo Padre pretende hacer todas las mañanas. Después de una cuidadosa reflexión, se ha considerado que la mejor manera de hacer accesible al gran público la riqueza de las homilías del Papa sin alterar su naturaleza es publicar un amplio resumen, también rico en citas originales que reflejen el sabor genuino de las expresiones del Papa (…) La solución elegida respeta ante todo la voluntad del Papa y la naturaleza de la celebración matutina y, al mismo tiempo, permite a un gran público acceder a los principales mensajes que el Santo Padre ofrece a los fieles, incluso en tales circunstancias”.

Sergio Centofani   –   Ciudad del Vaticano

Vatican News   –   Reflexión y Liberación

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